Si somos capaces de comprender lo que quieren los usuarios y cuál es su intención cuando realizan una consulta específica, tenemos una parte del trabajo de investigación de las palabras clave a usar en nuestro sitio.
Con los años, Google se ha vuelto cada vez más capaz de determinar la intención de búsqueda de los usuarios. Las SERPs, los resultados de búsqueda de Google, tratan de responder mejor a la intención de búsqueda del usuario y no a la palabra clave exacta buscada. Hay situaciones en las que el término exacto buscado ni siquiera se incluye en la página de resultados de búsqueda de Google. Y esto sucede porque Google se ha vuelto cada vez mejor para determinar la intención de búsqueda de los usuarios.
Con estos datos se redacatan los contenidos de las páginas de un sitio web o las fichas de producto de un ecommerce.