Cuando preguntas a un cliente sobre el sitio web que quiere o necesita tener, raramente te responde por la misión o el objetivo, y menos aún al público al que está dirigido ese sitio. Casi siempre la conversación gira en torno al “diseño web”, en realidad cuando suelen hablar de diseño, se refieren al aspecto visual que le gustaría que tuviera su sitio web, en la pantalla de un ordenador o de un portátil.
Con más de un 80% de usuarios que van a llegar a nuestro sitio web desde el teléfono móvil es necesario analizar como se “verá”, y en mi opinión también como se “usará”un sitio web en un smartphone, la optimización en móvil es fundamental.
El diseño de un sitio generalmente se presenta, se defiende, y es aprobado con mayor facilidad por el cliente cuando se le muestra la versión de ordenador, y de momento, para la mayoría de los clientes, la versión móvil sigue siendo el hermano pobre del ordenador. De hecho, son pocos los clientes que preguntan como se verá en móvil. Esto no hace nada más que retrasar el cambio de paradigma que los profesionales del mundo digital tenemos que afrontar ya: Mobile first.
En webs donde el usuario tiene que realizar una acción como rellenar un formulario o realizar una llamada de teléfono (por ejemplo una peluquería para pedir cita), y desde las que en su versión móvil es muy complicado poder hacerlo, pueden estar perdiendo 8 de cada 10 posibles clientes o contactos.
Por eso se debe ya plantear casi como necesario, en Shopoo ya lo estamos haciendo, tanto en diseño como en usabilidad, que la versión prioritaria — a veces dudo que sea correcto referirnos a versiones, y sea mejor usar tipo de dispositivo— sea la móvil. A pesar de las dificultades, y de que nos obligue a todos (profesionales y clientes) a salir de nuestra zona de confort.
Es cierto que cuando se trata de e-commerce y de productos de un determinado rango de precio, la impresión general y sobre todo los datos, nos indican que la conversión se realiza en ordenador, pero con un usuario permanentemente conectado, no sabemos donde vamos a impactarle. Si cuando está en la oficina, en el ordenador de la empresa, o cuando está en el metro con su móvil viendo videos en TikTok.
En cualquier caso, un usuario como el actual saturado de ofertas y de anuncios, raramente nos dará una segunda oportunidad.
